La blancura como metáfora del vacío

La mayoría de las veces, cuando pensamos o hablamos del blanco, prescindimos de definiciones. Como copo de nieve, polvo de cal, sal de salina bajo el sol, o pétalo de flor, el blanco simplemente se nos aparece frente a nosotros. Y ya. El blanco está ahí. Preciso en su presencia; enfático en su carácter distintivo.